Las Áreas Protegidas de la Unión Europea representan un activo fundamental para preservar la naturaleza y la biodiversidad y proporcionan múltiples beneficios en servicios ecosistémicos. Al mismo tiempo, también se ha comprobado que la pandemia del COVID ha acentuado aún más la importancia de los espacios naturales para el bienestar humano, lo que ha provocado un aumento del número de visitantes a las Áreas Protegidas. Esto tiene efectos positivos para las Áreas Protegidas, ya que la gente vuelve a valorarlas, pero también supone potencialmente un riesgo para la biodiversidad si el uso público no se gestiona de forma sostenible.
La mejora de las políticas públicas sobre Áreas Protegidas y el ajuste de la gestión de las AP es un paso necesario, si pretendemos crear ecosistemas resilientes para mejorar el bienestar de todas las personas que viven en Europa sin poner en peligro los objetivos medioambientales.
A finales de 2022 se aprobó el proyecto Interreg Europa GREENHEALTH, liderado por la Dirección General del Medio Natural de la Región de Murcia. La iniciativa busca mejorar la resiliencia de las áreas protegidas europeas mediante el fortalecimiento de los vínculos y la colaboración estratégica y operativa entre la protección de la biodiversidad y la salud humana.
En este proyecto participan también la Federación Europarc, como socio asesor, aportando sus conocimientos sobre el patrimonio natural europeo y los aprendizajes del programa “Healthy Parks, Healthy People”, además de socios de otras 5 regiones europeas: Podkarpackie (Polonia), Dubrovnik-Neretva (Croacia), Northern & Western Regional Assembly (Irlanda), Prešov (Eslovaquia) y Scania (Suecia).
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